Olga Lucía Castillo, del departamento colombiano de Tolima,
relató los sufrimientos de su hija Jessika Beltrán, de 12 años,
violada por el sargento Michael Cohen y el contratista César Ruiz,
hace dos años.
Según PL, Lucía rememoró que la noche de los hechos, los dos
funcionarios norteamericanos del Plan Colombia interceptaron a
Jessika y la obligaron a tomarse una gaseosa y una copa de licor.
me contó, dijo la madre, que no estaba en su sano juicio, estaba
borracha o, más bien, drogada. Esos hombres la manejaron a su
antojo, se la llevaron en una camioneta para la Fuerza Aérea de
Tolemaida, donde Ruiz tenía una habitación y la ultrajaron.
Luego la dejaron encerrada con llave y al otro día la tiraron en
el pueblo. A partir de entonces, Jessika vive temerosa y quiere
olvidar.
Lucía explica que pese a todos los esfuerzos hechos desde hace
dos años no ha logrado que se haga justicia, pues los soldados
norteamericanos tienen inmunidad en territorio colombiano.
Según el acuerdo, no pueden ser juzgados por los delitos que
cometan. Recuerda que solo en el 2006 hubo 23 casos de violaciones;
en el 2007 fueron 13, y en el 2008 se registraron 14 en la Comisaría
de Familia.
La madre colombiana afirmó que denunció a los culpables ante el
Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI), pero solo consiguió
intimidaciones para que retirara la demanda.