La atención de unos tres millones de personas en las Casas de
Orientación a la Mujer y la Familia de Villa Clara, durante 19 años,
ratifica su necesaria acción social en la comunidad.
En la cabecera provincial surgió la pionera de esas instalaciones
en Cuba el ocho de septiembre de 1990, como una importante esfera de
trabajo de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), la cual creó una
red nacional con 170 de estos centros.
El objetivo principal de las Casas es encauzar inquietudes
vinculadas a la real igualdad de los sexos, educación en el hogar,
guía jurídica y la preparación en varios oficios de la población
desvinculada del trabajo y el estudio.
Mayelín Díaz, miembro del secretario de la FMC en el territorio,
dijo a la AIN que la organización cumple sus 49 años el próximo día
23 con un reconocido trabajo en este frente.
Al quehacer cotidiano se suman nuevos proyectos como los
Tribunales de Familia, asesoría ofrecida sobre temas legales acerca
de la pareja y los hijos, agregó.
La labor de estos centros llega a la población con acciones
orientadas a la comunicación interpersonal, violencia familiar, y a
la prevención del alcoholismo, el SIDA y las drogas.
Idalmis Pedroso, profesora de belleza, imparte cursos de
peluquería y cosmetología desde hace 18 años en una de esas
instituciones ubicadas en esta ciudad.
Explicó la importancia de los cursos que facilitan un oficio a
hombres y mujeres que no estudian ni trabajan, para contribuir a su
incorporación más plena a la vida social.
Las 17 Casas de Orientación de la central provincia cubana
cuentan con la participación voluntaria de medio millar de
profesionales entre sicólogos, maestros, juristas, defectólogos y
médicos.