RÍO DE JANEIRO, 17 de agosto (EFE).—.- Cerca de once millones de
alumnos de las escuelas públicas de cuatro estados de Brasil
volvieron hoy a las clases después de dos semanas de receso por la
gripe A, epidemia que ha causado al menos 192 muertes en el país.
Los estudiantes de primaria y secundaria, de entre cuarto y
noveno año lectivo, se incorporaron a las clases en los estados de
Sao Paulo, Río de Janeiro (los más populosos de Brasil) y los
meridionales de Río Grande do Sul y Paraná, los cuatro más afectados
por el virus H1N1, causante de la enfermedad.
Los cerca de 300.000 alumnos matriculados en los tres primeros
cursos de primaria en estos estados prolongarán el receso una
tercera semana, hasta el próximo lunes.
El regreso de las vacaciones escolares de mitad de año estaba
previsto inicialmente para el pasado 3 de agosto, pero ante el
aumento de casos fatales de la gripe A las autoridades decidieron
prorrogar el descanso por dos semanas.
En varias regiones también se ha concedido una licencia extra
para las profesoras y alumnas embarazadas, que son uno de los grupos
de riesgo a los que la enfermedad ataca con más virulencia.
En Río de Janeiro y Paraná, las embarazadas se incorporarán a
comienzos de septiembre, mientras que se ausentarán por plazo
indefinido en Minas Gerais (sureste), estado en el que las clases
comenzaron el lunes de la semana pasada.
Con la vuelta a las aulas se han desplegado campañas informativas
para explicar los riesgos, cuidados y orientaciones básicas a los
alumnos para prevenir el contagio.
La Secretaría de Salud de Sao Paulo distribuyó en las escuelas
900.000 cartillas y cinco millones de folletos informativos que
deberán ser entregados a los estudiantes en el primer día de clase.
Además, la dependencia ordenó colocar carteles para estimular a
los niños a que se laven las manos con frecuencia, se tapen la nariz
y la boca al estornudar o toser y eviten las aglomeraciones o las
estancias poco ventiladas.
Las autoridades municipales de Curitiba, capital de Paraná,
entregaron a las escuelas un estuche con productos de higiene, como
una botella de alcohol en gel, mascarillas y una pastilla de jabón.
En Río de Janeiro, la Secretaría de Educación distribuyó 176
millones de vasos de plásticos descartables, suficientes para dos
meses, para evitar que los alumnos los compartan y aceleren así la
transmisión del virus.
Las escuelas tienen autonomía para organizar su propio calendario
lectivo, por lo que cada una definirá cómo va a recuperar las
semanas perdidas para cumplir las 800 horas de clase y 200 días
lectivos que marca la ley.
En Río de Janeiro se ha orientado a los directores de las
escuelas a que impartan clases en ocho sábados a partir de
septiembre y prolonguen el período lectivo una semana más en
diciembre, hasta las vísperas de Navidad. EFE