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— Una comisión independiente solicitó este miércoles que el Consejo
de Seguridad de la ONU se pronuncie contra el golpe en Honduras y
tome medidas que contribuyan al restablecimiento del orden
constitucional.
La Comisión, formada por expertos de Alemania, Argentina,
Austria, Bélgica, Colombia, Costa Rica, Dinamarca, España y Suecia,
realizó un amplio muestreo en Honduras de casos de violaciones de
los derechos humanos durante y después del golpe.
Indica que las acciones contra el presidente José Manuel Zelaya
el 28 de junio y denunciadas por miembros de la custodia del
presidente constitucional, fueron el inicio de una constante
escalada en las violaciones de los derechos de los hondureños.
El informe, dado a conocer en esta ciudad, plantea que es
violatorio de derechos el cese en su cargo del presidente, al no
existir norma constitucional o legal que posibilitara tal cese y la
designación del mandatario de facto, Roberto Micheletti.
Aborda la ilegalidad del Decreto Ejecutivo 011-2009 rubricado por
el gobernante golpista, que restringe libertades contempladas en la
Constitución del país.
Precisa que el anterior decreto no ha sido publicado hasta la
fecha en el diario oficial de la república de Honduras.
Cabe señalar, subraya, que el artículo 211 de la Constitución de
Honduras dispone que la publicidad de las normas constituye un
requisito esencial de validez de estas .
Agrega el documento que el decreto de suspensión de los derechos
fundamentales de los hondureños continúa siendo aplicado pese a
haberse vencido el plazo de 72 horas de duración contemplado en el
documento que dispuso estas restricciones.
La Misión, plantea el texto, muestra su perplejidad por la
actitud de apoyo al golpe de Estado mantenida por la alta jerarquía
católica y algunas iglesias evangélicas, y su implicación activa en
la organización de las movilizaciones de apoyo convocadas por los
golpistas.
Precisa que entre las violaciones se encuentra un importante
numero de ejecuciones extrajudiciales, centenares de detenciones
arbitrarias y múltiples amenazas.
El grupo constató una serie de transgresiones como desapariciones
forzosas, reclutamiento forzoso de jóvenes por el Ejército y graves
violaciones y restricciones a la libertad de expresión, entre otras.
Explica que el grupo recibió denuncias muy concretas de la
actuación de paramilitares, compuestos por civiles vinculados a
organizaciones de narcotraficantes y a equipos de seguridad privada
al servicio de destacados empresarios del país que trabajan
vinculados al XV Batallón del Ejército en el departamento de Colón.
En sus conclusiones, el grupo afirma que el decreto 11-2009, por
sus vicios, hace ilegitimas las medidas adoptadas con fundamento al
mismo por los golpistas.
El texto hace una serie de recomendaciones a la comunidad
internacional sobre acciones para presionar a los golpistas y que
sea repuesto en el cargo el presidente Manuel Zelaya, entre estas el
congelamiento de visas y de cuentas en el exterior.