Según el seguimiento de esa entidad, autocalificada de independiente, a la popularidad del 44 mandatario estadounidense, en la actualidad la aceptación está apenas un punto por encima de esa barrera.

Semejante resultado contrasta con la aprobación recibida por Obama al comienzo de su gestión, cuando al menos seis de cada 10 entrevistados telefónicamente por Rasmussen daban su visto bueno al primer negro sentado en la oficina oval.

De acuerdo con la firma, también baja la cifra de quienes brindan al ex senador por Illinois un apoyo incondicional.

Solo un 30 por ciento de los norteamericanos asegura respaldar fuertemente a Obama, criterio que hasta junio rondó un 40, precisa.

La alicaída economía y la polémica reforma de salud promovida por el presidente parecen lastrar su aceptación entre los votantes.