.— El gobierno de Estados
Unidos revocó una decisión de la anterior administración que
permitía ampliar la extracción de minerales en regiones aledañas al
Gran Cañón de Colorado, informaron hoy fuentes oficiales.
Un comunicado precisa que el secretario del Interior, Ken
Salazar, suspendió por dos años las nuevas exploraciones mineras en
un área de casi 400 mil hectáreas de tierras federales próximas al
Gran Cañón.
La medida anula una decisión del gobierno de George W. Bush de
abrir la tierra que bordea el parque, ubicado en Arizona, a la
minería de roca dura, incluida la extracción de uranio.
No obstante, se permitirá la explotación en las áreas que ya
estaban autorizadas.
El presidente Barack Obama ha dado marcha atrás a varias
iniciativas de su antecesor en el Casa Blanca.
Recientemente, Obama restableció una disposición que exige un
análisis científico independiente de cualquier proyecto federal que
pueda afectar a las especies protegidas.
Mientras, la Agencia de Protección Ambiental aplazó cientos de
proyectos de minería de cimas de montaña aprobados durante el
gobierno de Bush, para estudiar su impacto en el ecosistema.