Aquí
estamos para recordar genio y figura que no conocen la muerte, para
comprender la significación de una obra y una vida consagradas al
ejercicio de la poesía vista como riesgo y como aventura formal;
como devoción y cristal en el que se miran las dos grandes
vertientes del mestizaje de la Isla: la africana y la española,
destacó ayer Nancy Morejón, Premio Nacional de Literatura, ante el
panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias donde reposan los
restos de nuestro Poeta Nacional Nicolás Guillén, en ocasión del
aniversario 20 de su desaparición física.
La también presidenta de la Asociación Nacional de Escritores de
la UNEAC, subrayó que para Nicolás Guillén, el ejercicio de la
poesía ha sido un acto esencialmente vital. Su verso, claro y
sencillo, como bien quería José Martí, agregó, ha servido para
fustigar la garra del amo, para despertar la conciencia de los
humildes; para denunciar resueltamente las más sutiles o
desembozadas manifestaciones del prejuicio racial; en fin, para ser
la voz de las más puras aspiraciones de los cubanos.
La evocación transcurrió entre cantos revolucionarios
interpretados por la Banda de las FAR (La Marcha del 26 de Julio,
de Agustín Díaz Cartaza; El Mambí, de Luis Casas Romero;
nuestro Himno Nacional...) y poemas, como el recitado por
Alden Knight. Entre los asistentes se encontraban Jorge Risquet,
miembro del Comité Central del Partido; el Comandante del Ejército
Rebelde Belarmino Castilla Más; Nicolás Hernández Guillén,
presidente de la Fundación que lleva el nombre del autor del Son
entero y otros familiares y amigos.
Miguel Barnet, presidente de la UNEAC, finalizó expresando:
"Nicolás, desde aquí te decimos que seremos fieles al legado que nos
dejaste y la UNEAC que fundaste seguirá por el camino que le
trazaste". Y finalizó recitando su obra Cantos para soldados y
sones para turistas.