El senador republicano John McCain, ex candidato presidencial en
Estados Unidos, está detrás de la visita a Washington de los
representantes del gobierno de facto en Honduras. McCain, conocido
por su dura postura contra Venezuela, Bolivia y otros países en la
región considerados "antimperialistas", ha organizado una "rueda de
prensa" para los representantes golpistas a las 3:00 de este martes
en el prestigioso Club Nacional de Prensa en la capital
estadounidense.
Según la nota de prensa, enviada el lunes 6 de julio, "miembros
del congreso nacional hondureño, junto con representantes del sector
privado y ex miembros del cuerpo judicial de Honduras, darán una
rueda de prensa en Washington, D.C., para hablar sobre los últimos
sucesos en Honduras. La conferencia de prensa tomará lugar el
martes, 7 de julio del 2009, a las 3:00 p.m., en el salón Murrow del
Club Nacional de Prensa¼ La delegación
estará viajando a Washington para participar en varios días de
reuniones con políticos estadounidenses para clarificar cualquier
malentendido sobre el proceso constitucional hondureño, y para
conversar sobre los próximos pasos de seguir para asegurar la
salvaguarda de las instituciones democráticas del país".
La nota de prensa, anunciando la visita de los golpistas a
Washington, fue enviada por The Comac Group, un bufete de lobby en
Washington. Los principales clientes de esta consultora son grandes
multinacionales, como AT&T, DirecTV, Time Warner, National Football
League (NFL) y la empresa Bacardi USA, dirigida por la mafia cubana
anti-castrista en Miami. El fundador de The Comac Group, John W.
Timmons, fue abogado del senador John McCain y el director
legislativo encargado de la agenda comercial de McCain.
John McCain es el jefe de la junta directiva del Instituto
Republicano Internacional, (IRI)*, entidad considerada el
brazo internacional del Partido Republicano de Estados Unidos, y uno
de los cuatro "grupos clave" de la National Endowment for Democracy
(NED, Fundación Nacional para la Democracia). El IRI tuvo un papel
fundamental en el golpe de Estado en abril del 2002 contra el
Presidente Chávez en Venezuela, financiando, asesorando y luego
aplaudiendo a los grupos y actores involucrados. El IRI también ha
sido uno de los financistas y asesores más importantes de las
organizaciones y movimientos que han ejecutado las llamadas
"revoluciones de colores" en Europa Oriental.
Durante el último año, el IRI ha estado trabajando en Honduras
con fondos de la NED por encima de 1,2 millones de dólares, para
influir en los partidos políticos y "apoyar iniciativas para
implementar posiciones políticas durante las campañas del 2009. El
IRI pondrá énfasis especial en Honduras, país que tiene elecciones
presidenciales y legislativas en noviembre del 2009".
En marzo del 2009, durante una presentación de una representante
del IRI sobre su trabajo en Honduras, se hizo referencia del golpe
de Estado que estaban planificando contra el Presidente Manuel
Zelaya. En la presentación, la vocera del IRI explica la postura del
IRI contra el Presidente Zelaya, y luego habla del "golpe": "El
actual presidente, Manuel Zelaya, y sus panas, los izquierdistas de
América Latina, han causado bastante desestabilización política en
el país. Zelaya es un imitador de Hugo Chávez y de la revolución
social de Hugo Chávez. Ha pasado gran parte de su administración
intentando convencer al pueblo hondureño, personas muy prácticas y
centristas, de que el camino venezolano es la vía que hay que tomar.
Las tendencias izquierdistas de Zelaya intensifican los problemas ya
existentes. La corrupción está peor que nunca, el crimen ha
aumentado más que nunca. El narcotráfico y la violencia están
pasando por la frontera de México. Y existe un verdadero sentimiento
en el país de que hay una desestabilización interna, lo cual es
nuevo en la historia hondureña. Se pensaba que los golpes de Estado
eran de hace tres décadas, hasta ahora (se ríe y se ríe la
audiencia), de nuevo".
No queda duda ninguna de la relación entre los sectores
empresariales y republicanos con los golpistas en Honduras. Pero
también se puede preguntar: ¿Por qué el Departamento de Estado dejó
entrar a estos golpistas a Estados Unidos? ¿Por qué no fueron
revocadas sus visas? O es que aún, a pesar de todo lo dicho, ¿el
actual gobierno de Washington mantiene relación con los criminales
que violentamente secuestraron a un presidente democráticamente
electo, forzándolo al exilio, para luego reprimir a su pueblo y
violar normas y principios democráticos?
Está previsto que los representantes golpistas participen en
varias reuniones con diferentes congresistas, senadores y miembros
de la comunidad empresarial de Estados Unidos durante los próximos
días.