Cuando concluya el torneo internacional Batalla de Carabobo, la selección cubana de boxeo que se foguea para el Campeonato Mundial en Milán, Italia, a principios de septiembre, continuará entrenando en gimnasios venezolanos hasta el primero de julio.

Al cancelarse los I Juegos del Caribe, en Trinidad y Tobago, al que asistiría este equipo, la preparación se hará más prolongada en la Isla, toda vez que no hay confirmación aún de la asistencia a un torneo panamericano en México, a partir del 20 de julio.

La reciente prueba en el ring sudamericano de Valencia sirvió a los técnicos cubanos, a 65 días del inicio del Mundial, para nuevos diagnósticos en divisiones que aún pudieran estar marcadas por la incertidumbre.

Porque si todo continúa por los cauces normales de la preparación, no parece que habrá sorpresas en los representantes de los 51 (Yampier Hernández), 54 (Yankiel León), 60 (Idel Torriente), 64 (Rosniel Iglesias), 69 (Carlos Banteurt), 81 (José A. Larduet) y 91 (Osmay Acosta) por tres razones fundamentales: 1- por el nivel que muestran respecto a otros candidatos locales; 2- por el peso de su galardón olímpico de hace un año, en la mayoría de los casos, que significa a su vez experiencia para una nueva lid mundial; y 3- el rendimiento en las actuaciones extrafronteras, sobre todo en el Viejo Continente.

Por definir están cuatro categorías: 48, entre Daniel Matellón y Yunior Echevarría; 57: con la puja de Yasniel Toledo e Iván Oñate, 75: el duelo Emilio Correa vs. Rey Recio y + 91 el pleito Robert Alfonso-Erislandy Savón, y así completar una selección con la responsabilidad histórica de recuperar el prestigio de la escuela cubana en el podio internacional, en un ciclo que culminará en los Juegos Olímpicos de Londres’12.

En este orden, Richard Baker, portavoz de la Asociación Internacional de Boxeo (AIBA) ha expresado la preocupación de su organismo por el nuevo lugar que los organizadores londinenses han asignado para el torneo pugilístico, el Wembley Arena, al noroeste de la capital, cuyo recorrido pudiera durar hasta tres horas desde la Villa de los atletas, a diferencia del lugar inicialmente escogido, el Excel, mucho más cerca, que lo quieren para las pruebas de la gimnasia rítmica, la artística y el badminton.

Al cierre de esta edición se celebraba la final del Batalla de Carabobo con seis cubanos y la peculiaridad de que dos disputaban la faja de los 57: Toledo y Oñate. Correa se batía con el ídolo local Alfonso Blanco luego de vencer 3-2 al venezolano Juan Rodríguez; Banteurt contra el canadiense Maikel Zewski tras ganar 9-8 al anfitrión César Rodríguez; Iglesias ante Víctor Piñango (VEN) después de superar por RSC a Ángel Molero (VEN) y Larduet con el conocido del Cardín, el ecuatoriano Carlos Góngora, al imponerse 3-2 a Luis González (VEN).