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Autoridades sanitarias de Bolivia confirmaron hoy que en los
diferentes hospitales, donde recibían tratamiento, dieron de alta a
25 de los 31 contagiados con la gripe A(H1N1).
De acuerdo con el ministro de Salud y Deportes, Ramiro Tapia,
esos pacientes salieron del peligro, se encuentran en sus casas y
estables, aunque continúan en observación.
En diálogo con la prensa, Tapia también sugirió a las Fuerzas
Armadas flexibilizar los horarios en la instrucción del servicio
militar y premilitar.
Asimismo recomendó suspender por el lapso de dos semanas las
clases en las universidades públicas y privadas.
Tapia reiteró que los hospitales del país están en la obligación
de atender cualquier problema de influenza, habilitando para ello
áreas de aislamiento.
Aclaró que el gobierno central habilitará dos laboratorios
adicionales que se encargarán de analizar algunas muestras de la
gripe A(H1N1) para no colapsar el Centro Nacional de Enfermedades
Tropicales (CENETROP), en Santa Cruz.
El gobierno boliviano implementó el llamado Plan de Contingencia
contra el virus que incluyó la presencia de médicos en las fronteras
y en las terminales aéreas internacionales y de ómnibus para evitar
la propagación de la pandemia.