En declaraciones a la red Radio Patria Nueva, Mario Casa Quispe dijo sentir vergüenza de García y algunos de sus ministros por pretender que Morales pida perdón a los peruanos por los enfrentamientos en la ciudad amazónica de Bagua, con saldo de más de 33 muertos.

Lo que allí aconteció, afirmó Casa Quispe, fue una masacre un atropello de originarios.

El líder social también condenó el asilo político otorgado por Lima a tres ex ministros del otrora mandatario boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003), acusado de genocidio por una represión policial en octubre de 2003.

Este martes, también el vocero de Palacio Quemado, Iván Canelas, consideró que debe ser García quien pida disculpas al pueblo por perjudicar las gestiones para que Bolivia obtenga una salida soberana al océano Pacífico.

Canelas estimó que la posición de Lima es una directa provocación que generó problemas diplomáticos, que tensan las relaciones entre ambos países.

El funcionario respondió al canciller peruano, José García Belaúnde, quien pidió que el presidente Morales se disculpe por haber calificado de genocidio, que atribuyó al tratado de libre comercio (TLC) que firmó Perú con Estados Unidos, la matanza de indígenas el 5 de junio último.