Estudiosos y creadores cubanos rinden homenaje, en la ciudad
costera de la oriental de Manzanillo, Granma, al destacado poeta
Manuel Navarro Luna, uno de los mejores de Iberoamérica en el siglo
XX.
Conferencias, recitales de versos, presentaciones de libros y
encuentros entre instituciones culturales, animan la XXXVII jornada
literaria nacional dedicada al autor de "Surco", texto considerado
el iniciador del vanguardismo lírico en la Isla.
La cita, inaugurada el viernes último, reúne a escritores e
investigadores de Ciego de Ávila, Las Tunas, Holguín, Matanzas y
Granma, y concluirá mañana, cuando se cumplirán 43 años del deceso
del reconocido bardo.
El programa incluye la premiación del concurso nacional de poesía
que lleva el nombre del autor de títulos como Ritmos dolientes,
Corazón adentro, Refugio, Odas mambisas, Doña Martina, La tierra
herida y Pulso y Onda.
Nacido el 29 de agosto de 1894, en la ciudad de Jovellanos,
provincia de Matanzas, Navarro Luna vivió la mayor parte de su vida
en Manzanillo; estudió música, desempeñó oficios humildes, militó en
el Partido Comunista de Cuba y fue un destacado luchador
revolucionario.
Integró el famoso Grupo Literario de esa urbe, el cual publicó la
revista Orto (1912-1957), una de las más prestigiosas de su tiempo
en lengua española.
Sus obras resaltan los valores culturales y las tradiciones de
lucha del pueblo, además de hechos y personalidades de la historia,
como el general mambí Antonio Maceo.
Navarro Luna cultivó la prosa en libros como Siluetas aldeanas,
Cartas de la ciénaga, Los pasos del hombre y Las ideas de Manuel
Jibacoa.
Falleció en La Habana, el 15 de junio de 1966