Recordó asimismo que, a través del otorgamiento del indulto, Obama puede destacarse de los demás gobernantes que ha tenido Estados Unidos en las últimas décadas, ejecutando una acción real de reconocimiento y defensa de los derechos humanos y compromiso con la lucha antiterrorista.

En carta entregada hoy a la embajada estadounidense, el movimiento denunció que la ley y los derechos humanos se ven gravemente afectados y vulnerados por este proceso a Gerardo Hernández, Antonio Guerrero, Ramón Labañino, René González y Fernando González.

Ellos, al igual que usted, propugnan y defienden los mismos ideales de luchar contra el terrorismo y a favor de proteger la vida de todos los seres humanos, subraya la organización en la misiva.

Tras recordar varios aspectos del largo proceso judicial, que no puede, en ningún caso, ser calificado de justo ni de imparcial, agrega que la decisión de la Corte de Apelaciones de Atlanta reconoció que no se trataba de un caso de espionaje ni de un atentado contra la seguridad nacional de Estados Unidos.

Del proceso que actualmente conoce la Corte Suprema de Justicia de su país -continúa la carta- puede usted verificar y analizar declaraciones de militares estadounidenses que certifican que las actividades realizadas por estos cinco cubanos no pueden calificarse de espionaje.

Más de 200 integrantes de la agrupación, que este mediodía demandó con banderas cubanas y chilenas la liberación de Los Cinco frente a la sede diplomática norteamericana, le recordaron además las crecientes manifestaciones solidarias a nivel mundial, incluso en Estados Unidos.

Tras señalar la posición solidaria del destacado jurista chileno Juan Guzmán Tapia, el juez que procesó al dictador Augusto Pinochet, destacaron que 10 Premios Nobel presentaron una petición Amicus Curiae ante la Corte Suprema, exigiendo un proceso justo y la liberación de los cinco cubanos.

Ellos son José Ramos Horta, actual Presidente de Timor Leste (1996), Wole Soyinka, nigeriano (1986), Adolfo Pérez Esquivel, argentino (1980), Nadine Gordimer, surafricana (1991) y Rigoberta Menchú, guatemalteca (1992).