Yanet aprendió de José Martí

Jorge Luis Merencio Cautín

GUANTÁNAMO.— La pionera yaterana Yanet González Quiala, premiada en la oncena edición del Concurso Nacional Leer a Martí, asegura que la obra presentada por ella es fruto del desvelo del Maestro por fomentar la lectura y el saber entre los hombres de todo el mundo.

Momento de entrega del premio a Yanet González.

"Nunca podré olvidar que fue la Edad de Oro, la obra maestra escrita por José Martí para los niños, la que me despertó el hábito por la lectura y me enseñó a amar más a las personas, a los animales y las plantas".

Alumna de sexto grado en la escuela primaria Día de la Victoria, de su natal Palenque, Yanet fue galardonada por su trabajo El naranjo, el zunzún y Meñique, un cuento corto en el que esboza la importancia de preservar la naturaleza por todos aquellos que se benefician de ella y en el que la solidaridad del pequeño Meñique alcanza gigantescas dimensiones, tal y como nos enseñó el más universal de todos los cubanos.

"Mis padres y mi maestro Pedro Luis Pons también me han motivado a leer. Los primeros desde muy pequeña con lecturas propias de la edad y el segundo con sus enseñanzas en el aula y su ejemplo personal.

"Ellos siempre me recuerdan que sabe más quien lee más y me estimulan no solo a leer, sino también a escribir. Mi idea de escribir el cuento contó siempre con su apoyo y su motivación", comenta la avispada niña, quien recibiera, entre los varios reconocimientos, el de la ministra de Educación Ena Elsa Velázquez Cobiella, al visitar Guantánamo.

Afirma Yanet que el premio constituye una motivación para ella y los restantes niños de su escuela, quienes dramatizaron el cuento y ahora afilan la punta de sus lápices para alcanzar una mayor participación en la próxima edición del concurso.

 

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