La firma encuestadora de Estados Unidos Rasmussen Reports publicó
resultados que reflejan el descontento de muchos estadounidenses con
las gestiones del presidente, Barack Obama, y del Congreso.
De acuerdo con la entidad especializada en estudios de opinión
pública, el 28% de los consultados desaprueba con énfasis el trabajo
del Jefe del Estado, abanderado por el partido Demócrata.
Similar inconformidad está presente en tres de cada diez
ciudadanos desde el pasado mes de marzo, según muestra la pesquisa,
publicada este sábado.
Respecto al Parlamento, apenas 23% de los estadounidenses
considera excelente su labor, aunque esta cifra es la más alta que
ha registrado el Capitolio en los últimos dos años.
Expertos sostienen que tanto el presidente de EE.UU. como el
Congreso siguen pagando la herencia dejada por la anterior
Administración del republicano George W. Bush, a quien consideran
uno de los peores presidentes estadounidenses de todos los tiempos.
La crisis financiera, problemas sociales y las guerras en Iraq y
Afganistán determinan el criterio ciudadano, precisaron.
Aunque se refleja un rechazo popular, Obama presenta, según
Rasmussen, índices de aceptación muy superiores a los alcanzados por
Bush en el 2008.
Desde que asumió la presidencia en el pasado mes de enero, Barack
Obama se ha encontrado con realidades negativas en torno a diversos
temas, sobre todo en el ámbito económico. Un ejemplo de ello es la
tasa de desempleo, que subió hasta el 8,5% en marzo del 2009, con un
total de 13,2 millones de desempleados.
Además, se prevé que para final de año este número aumente hasta
el 10% (acercándose a los 15 millones de parados), un reto al que se
enfrenta el mandatario que debe probar su capacidad de diseñar
políticas eficientes que detengan el declive de la realidad
estadounidense. (Tomado de Telesur)