.— Unos 900 civiles lograron
escapar del estrecho territorio en el norte de Sri Lanka donde
tropas del gobierno mantienen cercado a los rebeldes tamiles
separatistas, informó hoy la Oficina de la ONU para Asuntos
Humanitarios (OCHA).
Un portavoz de ese organismo indicó que la ofensiva del gobierno
contra fuerzas leales a la organización Tigres de Liberación Tamil
Eelam continuaba a toda marcha en la zona de conflicto, donde unas
50 mil personas están atrapadas en un fuego cruzado.
Intensos ataques fueron lanzados por las fuerzas del gobierno el
pasado fin de semana, los cuales ocasionaron cientos de muertos y
heridos y que la ONU calificó de verdadero baño de sangre.
Según estimados de OCHA, desde octubre de 2008, más de 196 mil
personas huyeron de las áreas controladas por el gobierno en la zona
de conflicto, de las cuales más de 194 mil se encuentran en
campamentos temporales, en condiciones de hacinamiento.
El portavoz llamó la atención de que hasta la fecha se ha
recibido solamente el 32 por ciento de los más de 155 millones de
dólares solicitados a la comunidad de donantes para asistir a la
población de esa isla del océano Índico afectada por ese conflicto.