.— El gobierno
estadounidense encendió una luz de alerta debido a la baja
proporción de médicos por habitantes existente en el país, refiere
el diario The New York Times.
Según el rotativo, oficiales de la administración de Barack Obama
buscan la manera de aumentar el número de galenos para una población
en envejecimiento que demanda mayores servicios.
Si los seguros médicos extienden su cobertura a segmentos
poblacionales hasta ahora desprotegidos como pretende Obama, la
cifra actual de galenos resultaría insuficiente.
Funcionarios de sanidad expresaron particular interés en la
escasez de proveedores de cuidados primarios, fuente principal de
atención para la mayoría de los norteamericanos.
El Congreso discute una propuesta para aumentar los pagos a los
internistas y médicos de familia con dinero del seguro estatal, como
un mecanismo para incentivar la fuerza laboral en el sector.
Sin embargo, acota el rotativo, los especialistas rechazan la
aprobación de dicha medida porque una redistribución de fondos del
gobierno afectaría sus ingresos.
Ellos exigen que los legisladores encuentren dinero en otros
sitios para pagar los cuidados primarios, un pedido difícil en
tiempos de recortes, refiere el periódico.
Agrega que las soluciones propuestas chocan entre sí, pero el
gobierno reconoce la necesidad de hacer algo para cubrir la
creciente demanda de servicios.