El realizador español Javier Fesser dijo hoy aquí que rodar su
película Camino, Premio Goya 2009, fue un proceso apasionante
en una larga búsqueda de sentimientos. El filme se estrenará hoy en
la capitalina sala Charles Chaplin y es uno de los 10 que integran
la Semana de Cine Español del Nuevo Milenio, que se realiza hasta el
30 de abril.
En un encuentro con la prensa, Fesser explicó cómo llegó a esta
historia real de una niña de 11 años enferma de cáncer, que vivió
los últimos días de su vida en un hospital y encontró el amor por
primera vez.
Esta es una historia de amor, de la búsqueda de la felicidad, del
alma, que no pertenece a ninguna religión sino a la condición
humana, señaló el director, ganador de seis premios de la Academia
de Cine de España.
Desde que conoció hace 23 años la verdadera historia de Alexia
González-Barros, sintió la necesidad de contarla.
Camino, explicó, intenta narrar lo que vivió esta niña, lo que
pensaba y no sabía cómo expresar. Es un filme en el cual se siente
que para el amor no hay montañas.
El director relató que escogió a la protagonista, Nerea Camacho,
entre 500 niñas, en un casting que se extendió por varios meses. Sin
ella este largometraje no hubiera sido posible, es una actriz de la
que todos aprendimos, expresó.
El largometraje, de más de dos horas de duración, se exhibió
hasta el momento en México, Australia y Dinamarca y este mes sus
realizadores lo mostrarán en un campo de refugiados en el desierto
de Sahara.
Más allá de los premios y las críticas, Fesser aseguró que el
mejor regalo fue el rodaje mismo del filme. Es un homenaje y un
aplauso admirable a Alexia, concluyó.