El internacional Enrique Villaurrutia salvó a Cienfuegos del
naufragio ante Camagüey que se despidió con las botas puestas de la
final nacional de fútbol al batir 3-1 a los Marineros. Esa pizarra
no impidió que los campeones vigentes estén ante Villa Clara en la
disputa por el cetro el jueves y domingo próximos.
Pese al revés en la cancha agramontina del Patricio Lumumba, a
Cienfuegos le favoreció el marcador global (4-3) con su victoria en
el partido de ida 2-0 y al valor doble del gol anotado como
visitante.
Los sureños irán en busca de su cuarto título tras los
conseguidos en 1985, 1990 y 2008 mientras Villa Clara que se impuso
2-0 a Santiago de Cuba, en Zulueta. En esta última fecha de
semifinales, estará a la caza de su undécimo pergamino.
Ambos cuadros solo se han enfrentado una vez por el oro, en 1996,
con victoria para los naranjas. En el dramático encuentro en
Camagüey marcaron por los locales Dagoberto Quesada (m.17), Yaisnel
Nápoles (31), y Héctor Portel (69) mientras Villaurrutia hacía la
honrilla (¡ y qué honrilla!) casi con el pitido del primer tiempo.
Dominio alterno y juego rudo, nos comentó el colega Gilberto
Rodríguez desde esa sede. El veterano Serguei Prado, que se ha
sumado a posibles anuncios de retiro de otros estelares jugadores
cubanos, marcó los dos del triunfo naranja al 14 y 31.
El 23 y 26 de abril se definirán los lugares del uno al cuatro.