Las casas destruidas en Cuba por los huracanes en 2008 cuentan
con respaldo material en el presente año, informó en esta ciudad
Serapio Sierra Morales, vicepresidente del Instituto Nacional de la
Vivienda.
Sierra Morales precisó que el país puede garantizar los recursos
para la edificación de los casi 90 mil domicilios que sufrieron
derrumbes totales tras el paso de Gustav, Ike y Paloma.
El plan de construcción de viviendas para 2009 está destinado en
un 70 por ciento a esas moradas, de las que se conoce el tipo de
daño que sufrieron por los fenómenos naturales, precisó la fuente.
Unido a la cobertura de materiales constructivos, cada una de
esas familias, principales ejecutoras de su nueva residencia,
recibirá el apoyo de entidades para el traslado de los recursos, así
como también del asesoramiento de albañiles y plomeros, explicó el
directivo.
Sierra Morales agregó que todas las provincias tienen su
estrategia de acuerdo con la magnitud de las afectaciones, pero se
adelantará el tema de las cubiertas ligeras, ya que se dispone de un
volumen considerable de techo.
Ciego de Ávila construirá mil 160 casas, de ellas dará prioridad
a las 295 que fueron arrasadas por los recientes huracanes, así como
también rehabilitará e impermeabilizará edificios multifamiliares.
El funcionario presidió en esta ciudad el balance de ese
organismo en el territorio avileño.