Rafael Correa, presidente de Ecuador, aseguró hoy en la capital
cubana que las experiencias cubanas en materia de desarrollo
biotecnológico pueden ser de aplicación práctica en América Latina.
Es un ejemplo para el continente latinoamericano lo que hace el
Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), de Cuba,
declaró a la prensa el estadista ecuatoriano, quien visitó áreas de
la institución, una de las integrantes del Polo Científico del Oeste
de la Capital.
En esa instalación observamos mucho sentido, mucho realismo,
mucha eficiencia, dijo al comprobar y dialogar con especialistas del
CIGB.
Correa y su comitiva recibieron explicaciones sobre el
funcionamiento de ese Centro, el de Inmunología Molecular y de
Inmunoensayo, ninguno de los cuales compite entre sí, sino que
colaboran desde el diseño de un producto y servicio hasta su venta o
transferencia tecnológica.
José Miyar Barrueco, Secretario del Consejo de Estado, acompañó a
la delegación del mandatario de Ecuador, que se encuentra en Cuba
desde el miércoles pasado por invitación oficial.
Una de las características de la biotecnología cubana es la
integración entre todas las entidades. Siempre interviene más de un
centro en el proceso. Es algo que nos da fuerza en comparación con
otros países, coincidieron en señalar los directores de las
respectivas instituciones.
El Polo Científico del Oeste de la Capital incluye a la vecina
provincia de La Habana y sus expertos trabajan en decenas de
proyectos de productos y servicios para la elevación de la calidad
de vida de la población de la Isla, que ya erradicó 13 tipos de
enfermedades mediante inmunización.
La relación contempla difteria, sarampión, tos ferina, rubéola,
parotiditis, tétanos neonatal, meningoencefatilis, post parotiditis
y síndrome de rubéola congénita. La mayoría de los antígenos
utilizados en su producción son producidos nacionalmente.