Durante su intervención el primer mandatario ratificó el compromiso de su gobierno de impulsar proyectos sociales y pidió al opositor prefecto local, Rubén Costas, sumarse para trabajar juntos en los mismos.

Morales también resaltó los logros alcanzados en 2008 por la gestión del Movimiento al Socialismo, sobre todo en el sector económico.

Por su parte, la máxima ejecutiva de la Administradora Boliviana de Carreteras, Patricia Ballivián, significó la magnitud de la obra y su importancia para el desarrollo de Santa Cruz y de toda la nación andina.

El puente que pasa sobre las aguas del Río Grande costó 30 millones de dólares y fue construido con la cooperación del gobierno surcoreano.

Según algunos pobladores, antes el movimiento de vehículos y personas de un lado al otro del departamento era muy difícil y demoraba horas.