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La refinería de Cienfuegos, símbolo del ALBA
Armando Sáez Chávez
Tan empinada como su torre de 192 metros de altura, la refinería
de petróleo Camilo Cienfuegos simboliza el alcance de los proyectos
de la Alternativa Bolivariana para Las Américas (ALBA). Reinaugurada
el 21 de diciembre del 2007, acaba de cumplir su plan anual de 19
400 000 barriles.
La refinería de petróleo ha tenido un año productivo y eficiente.
Fernando Emilio García Steven, hoy supervisor de Operaciones de
la planta, recuerda con emoción la reapertura.
"Luego de la paralización total en 1995 llegué a pensar que nunca
más echaría a andar, y ya ve, gracias a la solidaridad hoy me siento
realizado como profesional, y mi familia disfruta las comodidades de
una de las petrocasas de la Comunidad Simón Bolívar."
UN ANTES...
En el primer semestre del 2005 se iniciaron inspecciones técnicas
a las instalaciones por parte de especialistas de las empresas CUPET,
de Cuba, y la venezolana PDVSA, con el objetivo de determinar el
costo capital de la planta en una primera etapa. Luego de los
análisis correspondientes fue aprobado en el 2006 el monto de la
inversión, ascendiente a 83 millones de dólares inicialmente —que en
definitiva llegaron a 136— y el 10 de abril de ese propio año se
constituyó oficialmente la empresa mixta PDV-CUPET S.A., con un 51%
de capital para la parte cubana y un 49% para la entidad de
Venezuela.
 La sala de control es sitio vital para la institución.
Una vez puesto en práctica el proyecto de remodelación y
modernización, un grupo numeroso de trabajadores retornaron a la
planta. Las ejecuciones más notables fueron la reparación capital de
las unidades de destilación atmosférica, reformación catalítica y
fraccionamiento de gases.
En otro orden, se instaló el Sistema de Control Distribuido
(completamente computarizado). Además, se reparó el área de
almacenamiento, producto terminado y de crudo, en estos últimos
tanques les fueron colocados techos de domos geodésicos. De igual
forma mejoró la infraestructura portuaria, con el dragado de las
dársenas y montaje de defensa en los muelles.
Cuando el buque-tanque Andros atracó en el muelle el ingeniero
José Manuel Suárez Águila sintió que un hormigueo invadió su cuerpo.
Así, la industria quedó lista para procesar 65 000 barriles diarios,
de los que podrían producirse a partir de ese momento diésel, fuel
oil, gasolina, turbocombustible y gas licuado
UN AHORA...
"Cuando el buque-tanque Andros atracó en el muelle de la
refinería Camilo Cienfuegos, el ingeniero José Manuel Suárez Águila
—director de Movimiento de Crudo y Productos— sintió que un
hormigueo invadió su cuerpo". Así describe una colega el arribo del
barco que traía los primeros 274 000 barriles del hidrocarburo. Para
más señas era el domingo 2 de diciembre del 2007.
A poco más de un año del acontecimiento Suárez confiesa que no
tasó en su justa medida que la planta fuera a responder de manera
tan óptima. La mayor satisfacción —precisa— es que en muy poco
tiempo de una entidad comercializadora que llegamos a ser, hoy somos
una productora, por cierto muy eficiente en todos los sentidos.
Durante estos doce meses las tranquilas aguas de la bahía de agua
se han visto surcadas por 58 barcos en cuyas bodegas llegó el crudo
a la Camilo Cienfuegos. Muy significativo resultó el arribo del Tour
Moon, con 386 000 barriles, el buque de mayor porte que ha navegado
hasta ahora por la rada sureña.
A la par, el proceso de refinación con productos terminados de
alta calidad y las transformaciones siguieron su curso. De tal
suerte hubo sensibles mejoras en los sistemas de la infocomunicación,
contraincendios y de protección.
UN DESPUÉS...
La llamada expansión de la refinería está en marcha, con el
objetivo fundamental de elevar la capacidad de diseño de 65 000 a
150 000 barriles diarios en el 2013, tras el paso del actual sistema
sencillo de refinación al de conversión profunda.
Por el momento se trabaja en el movimiento de tierra para el
montaje de cuatro nuevos depósitos de almacenamiento. Tres para
acumular diésel y uno para turbocombustible, con lo que la capacidad
de almacenamiento crecerá de 8 000 barriles a 139 000, explicó Raúl
Pérez de Prado, vicedirector general de la Empresa Mixta PDV-CUPEC.
Otra inversión inmediata, según detalló el directivo, será la de
un hidrofinador de diésel que cuando entre en explotación mejorará
el tratamiento del combustible con más azufre que debe utilizar la
termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes, enclavada a unos pocos
kilómetros de la refinería.
Además, se reactiva el oleoducto Cienfuegos-Matanzas que enlaza
el puerto matancero con la planta cienfueguera. Luego de las pruebas
instrumentales habrá que construir aproximadamente un kilómetro más
en territorio matancero.
Como parte de los trabajos de expansión de la empresa
cubano-venezolana se realiza un estudio de la bahía de Cienfuegos
—88 kilómetros cuadrados— en la búsqueda de una mejor logística en
la transportación de crudo y gas, abundó Pérez.
Hoy más que nunca adquieren total vigencia las palabras de
nuestro Comandante en Jefe cuando vaticinó: "Cienfuegos... es una de
las regiones del país llamada a adquirir un mayor desarrollo
industrial. No se trata de que la Revolución tenga privilegios con
Cienfuegos; fue más bien la naturaleza la que tuvo privilegios con
Cienfuegos... en el futuro deberá construirse... una gran refinería
de petróleo y nuestra industria petroquímica, al lado de la
refinería". |