Por
lo menos 34 personas murieron, 15 resultaron heridas y decenas más
están desaparecidas luego que un cerro se derrumbó sobre la
carretera y dejó bajo tierra a jornaleros y comerciantes en la
región norte del país.
Las autoridades guatemaltecas dijeron que hay unos 50
desaparecidos.
"Hay 34 cadáveres recuperados pero creemos que al momento del
deslave había por lo menos 100 personas caminando por el lugar",
informó el lunes en una entrevista con la AP el alcalde de San
Cristóbal Verapaz, Leopoldo Ical.
Dijo que se trataría de unos 80 jornaleros que iban a trabajar a
fincas cafetaleras de la región y otros 20 comerciantes que volvían
el domingo a sus casas tras vender y comprar productos el fin de
semana en el mercado de San Cristóbal, a unos 150 kilómetros al
norte de la capital.
Unas 165 personas, entre pobladores y rescatistas con perros
amaestrados, trabajan en el lugar del deslave en busca de más
desaparecidos pese a que aún caen piedras y tierra desde lo alto de
la montaña que no deja de crujir.
"Es tan grande el derrumbe que no quedan muchas esperanzas de
recuperar más cuerpos", señaló el alcalde.
El desprendimiento, de aproximadamente kilómetro y medio, ocurrió
en una carretera en construcción donde dos semanas atrás hubo otro
derrumbe que dejó dos muertos y tres desaparecidos.