La Oficina del Conservador de la Ciudad de Trinidad y el Valle de
los Ingenios, en la provincia de Sancti Spíritus, adopta medidas
para devolverle a la zona el verdor y la opulencia que poseyó años
atrás.
Según refiere el rotativo Escambray en su versión digital el
proyecto involucra a todas las entidades que inciden directamente en
el área y apunta que la limpia de marabú, y la siembra de caña y
kingrass para alimento animal, figura entre las acciones más
urgentes a acometer.
La labor desplegada hasta la fecha ha permitido reducir las casi
dos mil hectáreas de marabú que en marzo del 2008 existían en el
sitio declarado en 1988 Patrimonio Cultural de la Humanidad.
A juicio de varios especialistas de la Oficina del Conservador
los planes, cuyos efectos habrán de constatarse a largo plazo,
incluyen además las casas haciendas del lugar, la sustitución de los
techos de zinc que aún se aprecian en la región y el mejoramiento de
los viales.
Tras la restauración la estancia Guáimaro devendrá Centro de
Interpretación del Valle de los Ingenios; y San Isidro de los
Destiladeros, el Museo Arqueológico al Aire Libre y Centro de
estudios sobre el Patrimonio Industrial.
El Valle de San Luis, como también se le conoce a esta porción
del territorio trinitario, posee más de 70 sitios arqueológicos y
durante la primera mitad del siglo XIX vivió su mejor época de
esplendor cuando devino el mayor productor de azúcar de la Isla.