Luego de una incursión bastante exitosa en las ligas mayores, la cita anual de Cannes, la cinta argentina se estrenó en los cines franceses esta semana con buena recepción por parte de los especialistas.

Aunque tampoco los muy exigentes comentaristas galos se deshicieron en elogios, sí de forma casi unánime aplaudieron la madurez detrás de la cámara de Trapero (Mundo grúa, Familia rodante) y la actuación de Martina Gusmán.

Ella, en el papel de Julia, es condenada a prisión por asesinato, se encuentra embarazada y por tanto ingresa en una unidad especial para las mujeres de su estado.

Un tono seco, muy duro y realista, pero en cualquier caso con una Martina Gusmán excepcional y reveladora de gran capacidad histriónica, según los críticos de Canal Plus Televisión.

El diario Le Monde la encontró convincente y auténtica, pero consideró que el largometraje es demasiado previsible, mientras Nord Eclair opinó que se trata de una interesante historia, sin las complejidades de sus entuertos carcelarios salvada por Gusmán.

Le Fígaro elogió la labor de la pareja Trapero-Gusmán (Martina es la esposa del director) y señaló que Leonera ratifica la calidad del cine argentino y su ascenso al mejor nivel internacional.