.— Los métodos empleados
por los tribunales para juzgar a prisioneros en la base militar
estadounidense de Guantánamo eran inmorales y defectuosos, dijo en
entrevista divulgada hoy un ex fiscal implicado en ese proceso.
En su primera entrevista concedida a la cadena pública británica
BBC tras dimitir en septiembre pasado, el teniente coronel
norteamericano ya retirado Darrel Vandeveld señaló que las cortes
deshonraban la Constitución de Estados Unidos.
Vandeveld catalogó como cruel, equivocado y poco ético el trato
que recibían los detenidos en la cárcel estadounidense en
Guantánamo.
Era imposible garantizar un juicio justo en esas condiciones,
explicó el veterano de las guerras en Iraq y en Afganistán, quien
fue llamado en 2007 para ejercer como abogado militar tras los
atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
En su comparecencia a la BBC, Vandeveld declaró que enfrentó la
misión con entusiasmo, pero eso chocó con una fiscalía desorganizada
y falta de pruebas que hubieran atenuado los cargos contra los
prisioneros.
Según el ex fiscal, abandonó la tarea por el inhumano tratamiento
dado a los sospechosos de terrorismo recluidos en la citada base
militar y por el intercambio de mensajes que sostuvo con el
sacerdote jesuita John Dear, quien le sugirió dimitir.
Dear, conocido por su activismo social y su defensa de la paz,
dijo a Vandeveld en uno de sus mensajes que la operación de Estados
Unidos en Guantánamo era "una farsa".
Para el militar retirado su estancia en la base militar
constituye el periodo más angustioso de su vida.