ATLANTA.— Alrededor de uno de cada diez médicos estadounidenses que
vacunan niños contemplan dejar de hacerlo en gran parte, porque
pierden dinero cuando lo hacen, según un estudio difundido
recientemente, informó AP.
Un estudio demostró que existen diferencias enormes entre lo que
los doctores pagan por las vacunas y lo que se reembolsan los
seguros de salud privados. Por ejemplo, uno de cada diez galenos
perdió dinero al aplicar una vacuna específica para menores,
mientras otros ganaron casi 40 dólares por dosis del mismo tipo de
inmunización.
Herschel Lessin, pediatra de Hopewell Junction, en Nueva York,
dice que los gastos de su oficina en vacunación fueron el doble en
el 2007 que en el 2006.
Problemas de reembolso fueron los que provocaron el éxodo de
muchos doctores de programas de vacunación durante la década de
1980, lo que contribuyó a un aumento de casos de sarampión entre
1989 y 1991, que causaron 11 000 hospitalizaciones y 123 muertes.
Este año, los casos de sarampión en Estados Unidos han llegado a
su nivel más alto en una década, principalmente porque algunos
padres deciden no vacunar a sus hijos.