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La aviación israelí causó hoy la muerte a dos palestinos y heridas a
otros tres durante una incursión contra la Franja de Gaza, mientras
colonos judíos lesionaron a varias personas en disturbios
protagonizados en Cisjordania.
Un vocero del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas)
informó que un helicóptero hebreo lanzó un misil contra el sur de
este enclave costero, acción que obstaculiza aún más los esfuerzos
por restaurar la frágil tregua alcanzada en junio pasado.
Los palestinos fueron alcanzados por un cohete en una zona
próxima a la localidad de Rafah, fronteriza con Egipto, donde el
ejército israelí también realizaba incursiones desde horas
tempranas.
Hamas confirmó que sus hombres habían disparado al menos 16
cohetes Kassam contra el territorio judío en respuesta a agresiones
previas, pero fuentes médicas palestinas identificaron a las
víctimas como civiles, incluido dos hermanos adolescentes que
estaban en su casa.
Tel Aviv ha combinado las escaramuzas militares con el
recrudecimiento del bloqueo después de que a comienzos de noviembre
lanzó un ataque que dejó un saldo de seis muertos y desató la
respuesta armada de los islamistas.
Fuentes médicas dijeron que los lesionados recibieron atención en
un hospital de la ciudad carente de suficiente material médico a
causa del sitio hebreo, que ayer impidió atracar en el puerto local
a un barco libio con tres mil toneladas de ayuda humanitaria.
Entretanto, en la ciudad de Hebrón, en la Ribera Occidental,
ultranacionalistas residentes en los asentamientos judíos causaron
heridas a por lo menos 13 palestinos, incluidos menores de edad, y
se enfrentaron a las propias fuerzas policiales israelíes.
Los hebreos, que se niegan a acatar una orden de la Corte Suprema
de Israel para evacuar un edificio en disputa, lanzaron piedras
contra residentes y viviendas palestinas, y carros de la policía
poco después de circular rumores sobre una posible acción para
desalojarlos.
Paralelamente, en el norte de Cisjordania un grupo de israelíes
se enfrentó a las tropas fronterizas y bloquearon las calles para
mostrar su solidaridad con los colonos involucrados en la compra
ilícita de un inmueble palestino, que deberán abandonar.