Dalhis Dairen Pedroso, estudiante de noveno grado de la escuela
Solidaridad con Panamá, es una de las miles de personas con
limitaciones físicas que en Cuba tiene la posibilidad de ingresar a
la Educación Superior.
En una de las conferencias del I Encuentro Internacional de
Mujeres con Discapacidad, la joven expresó que "No hay limitaciones
en Cuba, podemos tener sueños y realizarlos".
Moraima Orozco, directora de Educación Especial del Ministerio de
esa esfera, anunció que más de cinco mil estudiantes cubanos con
discapacidad han podido continuar estudios en la Educación Superior,
entre el año 2004 y 2008.
La especialista agregó que otra de las muestras de la voluntad
política del Gobierno es la existencia de más de 400 instituciones
destinadas al aprendizaje de los menores con necesidades
educacionales especiales.
Añadió que a los centros se suman los maestros ambulantes para
aquellos que, por su limitación severa, deben recibir la enseñanza
en los propios hogares.
Estos profesores también se encuentran al frente de aulas creadas
en los hospitales, donde tienen que permanecer niños y jóvenes con
largas estadías de ingreso, dijo.
Destacó la escuela especial Solidaridad con Panamá, fundada el 31
de diciembre de 1989 por el Comandante en Jefe Fidel Castro, como un
paradigma de la educación especial en la nación caribeña.
En la cita las más de 150 mujeres representantes de 13 naciones
han abordado temas relacionados con la sexualidad, los retos que
implica el cambio climático para las mujeres con limitaciones
físicas, y políticas públicas dirigidas a este sector de la
población.