. — Los veteranos de
guerra, en especial los heridos, son una de las primeras víctimas de
la crisis económica que golpea a Estados Unidos, reveló hoy el
diario The New York Times.
Junto a las lesiones, el desempleo y la demora de los pagos por
invalidez son comunes entre los ex militares norteamericanos que
participaron en conflictos, subraya el periódico.
El problema es difícil de cuantificar porque no hay estadísticas
sobre el tema, aunque el Congreso solicitó al Departamento de
Veteranos cifras al respecto, agrega.
Para paliar sus dificultades, el Capitolio aprobó leyes que
impiden a un buen número de ellos perder sus casas mientras esperan
los fondos federales o una iniciativa que prohíbe aumentarles los
intereses durante un año.
Sin embargo, comenta el Times, esas medidas hacen poco para
revertir la situación, ante otros graves problemas como la falta de
empleo.
Según un estudio oficial, en 2007 de los mil 941 veteranos
interrogados un 18 por ciento no tenía trabajo, mientras la media
nacional era de 6,5 por ciento.
Recientemente el matutino señaló que el alcoholismo y la
participación en hechos delictivos también golpean cada vez más a
estadounidenses que participaron en las guerras de Iraq y
Afganistán.
La publicación citó estudios que atribuyeron el fenómeno a los
problemas mentales, sobre todo el estrés postraumático, sufrido por
los ex militares en los teatros de operaciones bélicas.
Una investigación de la Corporaciónn RAND fijó en más de 300 mil
la cifra de individuos afectados por tales padecimientos, luego de
servir en los territorios iraquí y afgano.
Aunque el alcohol es la sustancia de mayor incidencia, en los
últimos meses creció el consumo de drogas ilícitas por parte de los
veteranos, adicciones que con frecuencia los hacen comparecer ante
el sistema judicial, incluso por homicidios y otras situaciones
violentas, lamenta el Times.