España y Japón realizaron contribuciones monetarias al Programa
Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas para ayudar a
resarcir los daños de los huracanes Gustav e Ike.
Sonsoles Ruedas, representante del PMA en Cuba, informó que el
gobierno español, mediante su Agencia de Cooperación Internacional
para el Desarrollo, entregó un millón de euros, mientras que el
japonés asignó 800,000 dólares.
Añadió que ambas donaciones están dirigidas a reforzar la
alimentación de grupos vulnerables y el resto de la población
damnificada, en complemento de las raciones que entregan las
autoridades cubanas a todos sus ciudadanos.
Los dos aportes constituyen una respuesta a la iniciativa del
Sistema de las Naciones Unidas en Cuba de llamar a la comunidad
internacional a un Plan de Acción Post Huracanes 2008, por 30
millones de dólares, que se suma a una contribución inicial de las
instituciones de la ONU por 8,7 millones de dólares.
El programa lo presentó en octubre pasado la Coordinadora
Residente de la ONU en Cuba, Susan McDade y está encaminado a
reforzar la recuperación en el país por los daños provocados por los
meteoros de agosto y septiembre últimos.
Comprende dos fases: la primera de respuesta inmediata, con una
duración de seis meses y recursos necesarios por 13,8 millones de
dólares, y una segunda, por 12 meses, con necesidad de
financiamiento de 16,2 millones de dólares.
En los primeros días después del paso de los huracanes, el PMA
aportó un centenar de toneladas de alimentos por vía
aerotransportada, con el apoyo de España y Ecuador.