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La solución del vacío institucional registrado en Ecuador por la
ausencia de una Corte Nacional de Justicia está hoy en manos de la
denominada Corte Constitucional.
El presidente de la Comisión Legislativa, Fernando Cordero,
descartó la víspera que esa instancia de poder temporal pueda
aprobar una ley para prorrogar en sus funciones a los 31 ex
magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Puntualizó que aguardará por el dictamen de la Corte
Constitucional, organismo al cual se le preguntó si los ex jueces
siguen en sus funciones o qué, tras la entrada en vigencia de la
nueva Carta Magna.
Cordero descartó de este modo que la Comisión fuera a aprobar una
legislación que determine el retorno a sus puestos de los cesados
magistrados, como reclama Roberto León Mera, ex presidente de la
CSJ.
El momento en que los ex ministros de la justicia regresen será
como jueces y en una Corte Nacional temporal, como establece la
Constitución, aseveró.
Aclaró además que no pueden los otrora titulares reinstalarse
como ellos quieren, ni tampoco se lograría revivir a la ex CSJ, por
cuanto se volaría la Carta Política aprobada por la mayoría de los
ecuatorianos en un referendo.
Esos pronunciamientos fueron respaldados por el primer
vicepresidente de la Comisión de Legislación, César Rodríguez, quien
reconoció que la prórroga no es la solución para superar la crisis
judicial.
Se prevé que la Corte Constitucional ofrezca un dictamen sobre el
tema judicial dentro de 20 días, por lo cual el país seguirá otras
semanas más sin el máximo órgano administrador de la justicia.