El acopio de más de 952 millones de metros cúbicos de agua
representa el 95 por ciento de la capacidad de los embalses de la
provincia de Villa Clara, garantía para el abastecimiento en el
período seco, que comienza este mes.
Diego Emilio Abreu, especialista principal de la dirección
técnica en el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos en la
provincia, dijo que el almacenamiento del líquido resulta de una
etapa húmeda, de mayo a octubre último, desarrollada en los límites
de los promedios normales de lluvias.
Un análisis de ese lapso refleja al quinto y sexto meses del año
con precipitaciones por debajo de la media histórica, mientras
agosto y septiembre sobrepasaron los registros anteriores, tras el
paso de los huracanes Ike y Gustav.
El promedio de agua recogida en los pluviómetros de Villa Clara,
durante los seis meses de mayores lluvias en Cuba, fue de mil 178
milímetros, 187 por encima de la media histórica.
Abreu señaló que el régimen de precipitaciones favoreció a todos
los municipios del territorio villaclareño y se observa una
situación normal en el manto freático.
La cantidad de agua acumulada en la docena de presas de la
provincia, responde a las necesidades de abasto a la población y a
las exigencias de la agricultura.