A pesar del oleaje y las inclemencias del tiempo, la embarcación que había zarpado de Chipre el martes trasladó ayuda humanitaria para la población palestina que desde junio de 2007 sufre el recrudecimiento del sitio judío.

Las autoridades de Israel no podrán cercar a la Franja de Gaza por siempre. Volveremos una y otra vez, señaló a los periodistas Mairead Corrigan Maguire, galardonada en 1976 con el Premio Nobel de la Paz por su labor con católicos y protestantes en Irlanda del Norte.

El grupo de activistas lo integran, además, italianos, israelíes, palestinos y norteamericanos, y piensa permanecer en la franja cuatro días como muestra de solidaridad.

Al igual que amenazó en agosto pasado cuando se realizó un viaje similar, la cancillería israelí anunció que impediría el acceso al yate Dignity, pero hoy desistió de esa medida, aparentemente para tratar de silenciar el gesto de respaldo a los palestinos.

Policías de Hamas y decenas de pobladores dieron la bienvenida a los pacifistas, cuyo arribo coincidió con informaciones del asesinato de un agricultor a manos de soldados hebreos en Cisjordania.