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A escasos días de las elecciones municipales del 9 de noviembre, el
gobierno del presidente Daniel Ortega muestra algunos de sus logros
en materia social, lo que pudiera beneficiar a sus candidatos,
estiman hoy analistas.
Sometido a una feroz campaña de descrédito a su gestión por los
opositores liberales, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN)
mostró la semana última resultados para beneficiar a los sectores
populares.
La entrega de 213 escrituras a 28 congregaciones evangélicas,
algo postergada durante años de gobiernos liberales, fue uno de los
pasos de las autoridades en momentos en que la campaña por ganar la
mayor cantidad de las 147 alcaldías en disputa, entra en su fase
final.
El gobierno puso a disposición de 21 municipios del país 31
ambulancias y tres lanchas-ambulancias e inauguró un moderno
hospital, como parte de los retos que nos hemos propuesto para
mejorar la salud de los nicaragüenses, resaltó el presidente Ortega,
cuyo gobierno garantiza la gratuidad de la salud y la educación.
En la semana también fueron entregadas 400 viviendas a personal
de la salud, periodistas, maestros y policías, entre otros, a juicio
de analistas para enfatizar que la política gubernamental favorece a
los sectores más desprotegidos.
También fueron otorgadas 25 mil cocinas de gas con su balón,
parte de un plan de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de
Nuestra América (ALBA), para facilitar 200 mil a familias
nicaragüenses de bajos ingresos.
Durante esta última actividad realizada la víspera en la Casa de
los Pueblos, en Managua, Ortega criticó a la oposición liberal
porque, dijo, se creen dueños del país. Dueños de la mentira, del
egoísmo y de la maldad, expresó.
Sostuvo que en la campaña por las alcaldías le andan pidiendo el
voto a los pobres para servirles a los ricos.
En Nicaragua, subrayó, estamos cumpliendo con los programas del
ALBA: casas para el pueblo, cocinas para el pueblo, créditos para el
pueblo. Estamos cumpliendo y seguiremos cumpliendo.