En un principio el gobierno estatal fijó la cifra de muertos en 147, pero reportaron nuevos decesos ya que muchos cadáveres fueron llevados a sus casas por familiares y las autoridades no estaban al tanto de esos casos, señaló Kiran Soni Gupta, comisario de la policía local.

Unos 10 mil devotos acudieron en la madrugada del martes a ese sitio sagrado hindú por el comienzo de Navratri, pero la falta de orden y rumores de una presunta bomba desataron la mortífera espantada, que dejó además 60 heridos.