MOSCÚ, 1 de octubre.— El laureado pianista Frank Fernández iniciará la Jornada de la Cultura Cubana en Rusia con un concierto en la Sala Grande del Conservatorio Chaikovski de esta capital, aseguraron hoy fuentes diplomáticas de la Isla.

La presencia de este relevante artista en esa gala el próximo sábado es motivo de orgullo para nuestra legación, afirmó el embajador, Juan Valdés, en rueda de prensa a la que asistió el compositor e intérprete de renombre mundial.

El latinoamericano que más veces (16) se ha presentado en los escenarios de la institución considerada templo de la cultura mundial, explicó que esta actuación tendrá un carácter diferente a todas las anteriores.

En mi sexta actuación en la Sala Grande del Chaikovski, por primera vez, compartiré la parte de solista con otro pianista, el brasileño Joao Donato, conocido como el Rey de la Bossa Nova, sostuvo el autor de Zapateo por Derecho.

Fernández explicó que Donato, acompañado por la Sinfónica de Moscú bajo la dirección de Serguei Sumbatián, interpretará en la primera parte una serie de obras famosas de ese género, casi todas compuestas por él, aunque incorporará temas de Joao Gilberto y otros grandes.

Por mi parte, rendiré homenaje a José White con La Bella Cubana, en ocasión de los 90 años de su muerte, que se cumplen este año, y después el público escuchará tres danzas de las más paradigmáticas de Ernesto Lecuona para piano, comentó.

Estas piezas de Lecuona —Comparsa, Danza Negra y Malagueña—, fueron escritas originalmente para piano solo, y yo las traigo con arreglos para orquesta sinfónica y versiones mías para piano, adelantó.

En la parte de la orquestación le ayudaron los maestros Mario Romeu, eminente pianista, orquestador y director, y Roberto Sánchez Ferrer, director del Teatro Lírico de La Habana, dos creadores de primera línea.

Para finalizar el concierto interpretaré Rapsody in Blue, de George Gerswing, en la versión original sinfónica de Ferdé Grofé, dijo el artista.

Al escribir solo el piano, Gerswing sugirió todo el maravilloso trabajo orquestal de Grofé, que el público moscovita podrá apreciar, agregó Fernández.

El pianista destaca como otra novedad en esta ocasión la utilización de la batería, escrita en la partitura, pero que raramente se incluye en las grandes salas de concierto.

Tengo el privilegio de que me acompañe el joven baterista de 22 años Rui Adrián López-Nussa, miembro de una dinastía de grandes artistas de nuestro país, señaló.