Cederistas de toda la nación:

Las batallas que estamos librando y las que se avecinan, serían hoy mucho más difíciles si no existiera la organización que acoge en su seno a más de 8 millones de cubanos, y que tiene como escenario principal el barrio.

La creación de los Comités de Defensa de la Revolución por la idea preclara de nuestro máximo líder Fidel, confirmó la decisión irrenunciable del pueblo de defender su dignidad, de existir como nación y de mantener por siempre los derechos conquistados.

A lo largo del proceso revolucionario que ya se acerca a los 50 años, los Comités han estado en cuanta tarea ha sido necesaria.

Esta vez, las adversidades climatológicas han puesto a prueba la capacidad de resistencia de nuestro pueblo y, como siempre, en cada rincón de la patria se han erguido más fuerte que un ciclón, más arrollador que huracán alguno, la solidaridad, la firmeza, la laboriosidad y el deseo de vencer.

Recuperarse de los daños causados por Gustav y Ike es hoy prioridad uno en la que se encuentran obreros, campesinos, jóvenes, en fin, hombres y mujeres cederistas revolucionarios a los que hacemos llegar nuestras felicitación y reconocimiento. Especial mención a los trabajadores de la Empresa Eléctrica, de ETECSA, a los forestales, combatientes de las FAR y el MININT, a quienes han convertido sus casas en escuelas, a los que acogen al vecino cuya vivienda fue dañada, a todo el que ha dado un poco de sí para recuperar lo dañado por los huracanes. Su ejemplo se acrecienta cada día en ese barrio multiplicado que se llama Cuba.

En el Aniversario 48 de la creación de los CDR, les convocamos a mantener ese espíritu de lucha, a trabajar cada día en la recuperación con más ahínco, a demostrar que a este pueblo a quien no ha doblegado el cruel bloqueo imperialista, no cederá en su empeño de salir adelante por fuertes que sean las adversidades o duras las pruebas que impongan las circunstancias.

Con la misma voluntad, cada cederista está llamado a convertirse en celoso guardián de la legalidad, a desarrollar un combate frontal contra toda conducta que dañe el prestigio de la Revolución, derrotar el desvío, el trapicheo, el lucro con los bienes del pueblo que debilitan al socialismo. En la reflexión del Comandante en Jefe "Los vicios y las virtudes" se resume el mandato de la patria a combatir sin más dilaciones.

"No solo lucharemos sin tregua contra nuestros propios errores, debilidades y vicios, sino también ganaremos la batalla de ideas en la que estamos enfrascados.

"Si de algo podrán estar seguros los jefes del imperio, es que ni huracanes naturales ni huracanes de cinismo lograrán doblegar a la Revolución".

Sigamos el ejemplo de nuestros Cinco Héroes prisioneros del imperio que no se doblegan ante nada ni renuncian a sus principios.

Reciban nuestro saludo en este nuevo Aniversario y tengan la certeza que siempre la victoria será nuestra.

¡Más unidos y más combativos, defendiendo el socialismo!