Nos encontramos en la ciudad de Manaos y analizaremos el ambicioso proyecto vial para unir los océanos Pacífico y Atlántico, resaltó Correa, en su alocución de este sábado, realizada desde el Palacio de Carondelet (sede la Presidencia).

Puntualizó que existe gran interés por el proyecto que unirá a través de carreteras, ferrocarriles y por vía fluvial la ciudad ecuatoriana de Manta, en la costa del Pacífico, con la urbe brasileña de Manaos.

Se trata de establecer una nueva ruta entre los océanos Pacífico y Atlántico, recalcó el mandatario, quien abordó temas políticos, pero no habló sobre la campaña electoral, finalizada la noche del jueves último, debido a que está prohibido por ley.

Correa señaló que evaluará también con Lula el asunto de la empresa brasileña Odebrecht, la cual expulsó del país el martes pasado y ordenó el embargo de sus bienes e inmuebles por negarse a pagar una indemnización de 43 millones de dólares por la rotura y paralización de la hidroeléctrica San Francisco.

Destacó que el gobierno estuvo a punto de llegar a un acuerdo con Odebrecht, pero dos veces se echaron para atrás a último minuto, lo cual calificó de burla para el país.

El jefe de Estado anunció que recibió ayer un documento firmado de manera unilateral por Odebrecht, en el cual acepta todas las exigencias del ejecutivo.