Afectado por el reciente huracán Ike, el estadio Augusto César
Sandino, de esta ciudad, se alista para acoger desafíos de la
venidera Serie Nacional de Béisbol, desde el próximo 30 de
noviembre.
Sol Ángel Pérez, administrador del recinto deportivo, dijo a la
AIN que los principales daños ocasionados por el evento
meteorológico se localizan en el techo de las gradas, donde los
fuertes vientos arrancaron el material impermeabilizante, situación
que no afecta el desarrollo de los partidos.
El ciclón destruyó parte de la jaula de bateo, área recuperada
con el esfuerzo de los trabajadores de la instalación, la cual sirve
actualmente de sede principal de entrenamiento a los
preseleccionados de Villa Clara, rumbo a la edición 48 del clásico
doméstico, destacó.
Pérez señaló que en los días previos al huracán se realizó un
intenso trabajo de mantenimiento y drenaje en el terreno de juego,
que se considera uno de los mejor conservados de Cuba, labores que
fueron decisivas para que apenas sufriera los embates de las
precipitaciones asociadas al meteoro.
Sin embargo, resultaron dañados 50 de los colchones que protegen
a los peloteros de posibles golpes contra las paredes de hormigón,
problema que debe resolverse antes del inicio de la Serie Nacional,
explicó.
Las luminarias, pizarra informativa y la cabina de trasmisiones
fueron convenientemente protegidas y se encuentran en perfectas
condiciones.
Actualmente se trabaja en el mejoramiento de los banquillos y
salas de estar de los atletas.