Jubiloso regresó ayer el tercer grupo de la delegación cubana que participó en los XIII Juegos Paralímpicos de Beijing’08, donde la mayor de las Antillas cumplió una actuación histórica al concluir en el sitial 23 entre 148 naciones, con cinco medallas de oro, tres de plata y seis de bronce.

"Fueron unos Juegos de altísimo nivel, pero tenía la certeza de que lograría mi medalla de oro", declaró a su llegada el discóbolo Leonardo Díaz Aldana (silla de ruedas), campeón paralímpico con nueva cota del orbe (40.87).

"Escuchar el himno de tu país es lo más grande. Es un momento especial, pues sientes que ha valido la pena todo el esfuerzo y los sacrificios", comentó a su vez Luis Galano (débil visual), quien debutó por todo lo alto en citas de este tipo al coronarse en los 400 metros planos con récord para el certamen.

"Sabíamos que iba a ser una competencia muy fuerte. Fue un evento muy bien organizado. Beijing es una ciudad increíble. El pueblo chino nos acogió con una solidaridad extraordinaria", añadió el corredor santiaguero.

En la terminal aérea José Martí de la capital, José Ramón Fernández, vicepresidente del Consejo de Ministros y titular del Comité Olímpico Cubano, transmitió a los 23 recién llegados el deseo de Raúl de asistir al recibimiento, propósito que no pudo cumplir por tener que estar al tanto de las tareas de recuperación tras el paso de los huracanes Gustav e Ike.

No obstante, Fernández trasladó a los atletas el saludo y la satisfacción del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, y del pueblo entero, por el esfuerzo, la dignidad, el tesón y el espíritu vencedor con que enaltecieron el orgullo patrio.

Junto a Fernández recibieron a la comitiva Lázara Mercedes López Acea, miembro del Secretariado del Comité Central; Roberto Montesinos, jefe del Departamento de Educación y Deportes del Comité Central, y Christian Jiménez, presidente del INDER, entre otras personalidades.