Marcados por la angustia y la
incertidumbre, familiares de
cinco cubanos que impidieron actos terroristas contra su
país aguardan cada año por visas estadounidenses para poder
reencontrarse con sus seres queridos.
El caso de
Los Cinco, como se les conoce internacionalmente, trascendió
el umbral del olvido a partir de la tenacidad de madres, esposas e
hijos, y del compromiso de Cuba de mantener la vigencia del tema
como el primer día.
Elizabeth Palmeiro, esposa de
Ramón Labañino, uno de los cinco, no ceja en su empeño. Vino
a Alemania para actualizar el caso, cuando se cumplen 10 años del
encarcelamiento también de
Gerardo Hernández,
Fernando González,
Antonio Guerrero y
René González.
Sus anécdotas son desgarradoras y en palabras de numerosos
diputados alemanes de diversos partidos, son conmovedoras. Al lado
de sus dos hijas, vive literalmente de las convicciones y el amor
para sobrellevar con dignidad el asunto.
Ante los parlamentarios de los partidos La Izquierda,
Socialdemócrata, Los Verdes y Liberal Demócrata, expuso sin
vacilaciones todas las penurias que pasa cada vez que intenta ver a
su marido.
La última vez que lo vi fue en mayo de 2006 y en septiembre del
mismo año solicité la visa en la Oficina de Intereses de Estados
Unidos en La Habana. Me dieron una cita para marzo de 2008, la cual
apelé, explicó.
Con dos hijas adolescentes, que siempre la acompañan a ver a su
padre, finalmente en septiembre de 2007 tuvo la entrevista en la
misión diplomática. Resultado: una larga espera que derivó en la
concesión del permiso hace apenas 20 días.
Pero todo no termina ahí. Enfrentamos otro proceso desde la
llegada a territorio norteamericano, los estrictos controles en la
prisión de Ramón y requisitos que incluyen un beso y un abrazo de
bienvenida y otros de despedida exclusivamente, anotó.
Al final, admitió con resignación, soy afortunada si me comparo
con Adriana (esposa de Gerardo) y Olga (compañera de René), quienes
nunca recibieron los visados correspondientes en 10 y ocho años,
respectivamente.
En Alemania, Elizabeth Palmeiro recibió aliento y determinación
de ir más allá de la solidaridad formal. Varios legisladores, con
rango de juristas, prometieron acciones para sensibilizar a la
opinión pública mundial.
Ninguno de ellos se explica como pueden ocurrir cosas así en un
país que pondera el Estado de derecho y aplica, sin embargo, el
doble rasero para analizar los expedientes del terrorismo.
Después de escuchar el relato de Elizabeth Palmeiro sobre las
penurias y vejaciones a las que son sometidos los familiares para
poder visitar a sus seres queridos en las prisiones los
parlamentarios alemanes se manifestaron indignados y sorprendidos
por las violaciones de los derechos humanos de la justicia
estadounidense con el caso.
Hay trasgresiones insólitas y sin precedentes en la aplicación
del derecho internacional humanitario en el caso de los Cinco,
coincidieron seis diputados y políticos germanos de los partidos La
Izquierda y Socialdemócrata (SPD).
Petra Pau, vicepresidenta del Bundestag (Parlamento), e
integrante de la directiva de la Izquierda, subrayó la importancia
de sensibilizar a la opinión pública mundial a partir de los
evidentes intereses políticos que rodean al capítulo de Los Cinco.
El integrante de la comisión de Asuntos Exteriores y vocero para
América Latina del Bundestag, Lothar Mark (SPD), confesó que sus
colegas estadounidenses ni siquiera responden a sus cartas, lo cual
indica que el Congreso de ese país no es capaz de pronunciarse.
Saben que los elementos que se manejan para sabotear las visitas
de los familiares de los Cinco son insostenibles, se comete una
flagrante violación de los derechos humanos. Niegan la condición de
Estado de derecho de ese país, recalcó.
El legislador socialdemócrata Peter Danckert se declaró
conmovido. Nunca he visto algo así en los más de 30 años que tengo
como jurista. Es inadmisible, subrayó.
Asimismo, el vicepresidente de la comisión Jurídica del
Bundestag, Wolfgang Neskovic (La Izquierda) y la titular de la
Comisión de Peticiones del parlamento teutón, Kersten Naumman
(diputada del mismo partido), expresaron su solidaridad y apoyo al
tema.
De forma similar habló Helmut Scholz, jefe del Departamento de
Relaciones Internacionales de La Izquierda, y miembro de la
directiva del Partido de la Izquierda Europea