El acopio de más de 921 millones de metros cúbicos de agua, para el 91 por ciento de la capacidad de las presas de Villa Clara, favorece la situación hídrica hacia el inicio del período seco en noviembre próximo.

Diego Emilio Abreu, especialista principal en la dirección técnica en el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) en la provincia, dijo a la AIN que ahora vierte la presa Alacranes, la mayor del territorio villaclareño, con un gasto de 300 metros cúbicos por segundo.

El embalse acogió el suministro que llegó desde cuatro ríos, que recibieron abundantes precipitaciones resultado del azote a Cuba del huracán Ike.

Según el experto, en este caso los riesgos de inundación a zonas pobladas están vinculados a la fuga de un volumen de 450 metros cúbicos por segundo, no obstante se mantiene una estrecha vigilancia en relación con comunidades existentes en zonas bajas.

La cantidad de agua acumulada en la docena de presas de Villa Clara fue del 85 por ciento en septiembre del año prededente, lo que muestra ahora mayores posibilidades para responder a las necesidades de abasto a la población y las exigencias de la agricultura, fundamentalmente.