Las matemáticas aún no eliminan a la selección cubana de fútbol pero la realidad, hasta ahora, no despierta ilusiones. De todas maneras queda todavía por cumplir un calendario y después de tres derrotas seguidas, Cuba tendrá que viajar a Washington para disputar el 11 de octubre la cuarta fecha de las semifinales de la Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe (CONCACAF) camino al Mundial de Sudáfrica-2010.

Después de caer ante EE.UU., en el Marrero, los cubanos también fueron superados por los chapines.

Sin saber si el técnico alemán Reihnold Fanz podría enderezar el rumbo de la nave cubana pese a sus buenas intenciones y a sus esfuerzos en conseguir viajes de preparación a Europa, los cubanos regresan a casa con otra goleada a cuesta,1-4 en Guatemala, y tienen ahora 2 goles a favor, 8 en contra y cero puntos.

La visita a la capital chapina se ensombreció con la expulsión —cuyos motivos no han estado claros— del delantero Roberto Linares, autor del gol, quien por consiguiente no podrá actuar en la capital norteamericana.

Los otros dos reveses, como se conocen, fueron en casa: ante Trinidad y Tobago (1-3) y EE.UU. (0-1).

La tabla del grupo A presenta a EE.UU., 9 puntos, Guatemala y TT0,4, y Cuba, 0. Los chapines tienen mejor promedio de goles que los trinitarios.

Cuba está virtualmente descartada, sin embargo, los números aún le acompañan: perdiendo con los norteamericanos tienen chance de clasificar, si ganan los dos partidos restantes y los del Tío Sam también superan en su casa a Guatemala y a Trinidad en Puerto España (este miércoles ya les golearon 3-0) y estos empaten entre ellos.