Como se pronosticaba, los tres municipios del norte de la
provincia de Las Tunas, Jesús Menéndez, Puerto Padre y Manatí fueron
severamente afectados por el huracán Ike.
Aunque en estos momentos se valoran los daños, se sabe que los
fuertes vientos y las lluvias causaron serios daños a viviendas,
plantaciones agrícolas y edificios de la economía, educacionales y
de salud.
Este es el fenómeno meteorológico de mayor potencia que ha
penetrado en el actual territorio de Las Tunas y, sin embargo no se
reportan fallecidos, gracias al cumplimiento estricto de las medidas
adoptadas por el Consejo de Defensa Provincial.
Aunque las lluvias continúan afectando el territorio, comenzó la
fase recuperativa con la limpieza de los viales, obstruidos por los
árboles caídos.
El Consejo de Defensa, encabezado por su presidente Jorge Cuevas,
orientó valorar las viviendas destruidas total y parcialmente, con
el objetivo de distribuir los recursos disponibles.
Se insistió en resolver las dificultades con esfuerzos propios y
medios locales, a tenor de que al igual que Las Tunas, varias
provincias también han sido castigadas por Ike.
En estos momentos se cuantifican los daños para conocer en
detalles los lugares más vulnerables de la población y la economía.