"Todo equipo necesita del respaldo de su público y sería una
importante ventaja para nuestros jugadores ese aliento el sábado",
dijo el técnico alemán de la selección cubana de fútbol, Reinhold
Fanz, al concluir uno de sus entrenamientos para el duelo con
Estados Unidos en las eliminatorias mundialistas de la CONCACAF.
Los norteamericanos, en la actualidad en el lugar 28 del ranking
mundial de la FIFA y número dos de la región —México se ubica en el
24— son favoritos para encabezar el grupo A y adueñarse de uno de
los tres boletos directos que otorga la zona para el Mundial de
Sudáfrica-2010.
Fanz espera que sus pupilos no cometan los mismos errores que
condujeron al fracaso en el debut frente a Trinidad y Tobago (1-3).
"Vamos a hacer algunas modificaciones y una será intentar reforzar
el medio campo. No jugaremos con temor ni metidos atrás, apostaremos
por actuar agresivos, y con orden", puntualizó el adiestrador
germano que desde hace cinco meses tomó las riendas del seleccionado
con el propósito de buscar el tique hacia la cita mundialista.
Estados Unidos llega hoy a La Habana, 61 años después de su
última visita, con varios "veteranos" en campeonatos del orbe y 14
"legionarios" que se desempeñan en primeras divisiones de Europa y
México, aunque su principal figura, Landon Donovan, lo hace en la
Major League Soccer (MLS), estelar escenario balompédico
norteamericano.
"Ganarle a EE.UU. será difícil, pero no imposible", comenta Fanz
al reconocer las virtudes del juego de los visitantes, aunque
advierte que entre sus debilidades cuenta con una defensa lenta que
pudiera ser vulnerada por los cubanos, pues "estos son veloces y si
se atreven a meterse en el área le podemos complicar el partido. Los
hombres saben la responsabilidad que asumen en este juego, con sus
aspiraciones; a diferencia de otras épocas, han tenido en esta
ocasión una buena preparación y deben demostrarlo en la cancha",
apuntó.