Ante denuncias de campesinos de acciones violentas de terratenientes contra los productores instalados en tierras recuperadas, Chávez orientó a la Guardia Nacional reforzar su protección y detener a quienes violen la ley.

El mandatario presidió en Calabozo, estado Guárico, unos 200 kilómetros al sur de Caracas, un acto de entrega de certificados de condonación de deudas a productores agrícolas, como parte de un plan que beneficiará a 18 mil de ellos.

La deuda condonada corresponde a unos 115 millones de dólares entregada en 2004 a productores que no pudieron honrarla por problemas climatológicos.

Chávez también estuvo presente en un desfile de maquinaria agrícola recién adquirida en Belarús y Argentina integrada en una empresa que ofrece servicios a los productores a la mitad del costo usual e incluso gratis para los de pocos recursos.

El plan forma parte de una proyección de estímulo a la agricultura que también incluye entrega de semillas, regadíos y ayuda técnica, que busca terminar con el carácter monoproductor petrolero de Venezuela.

El presidente venezolano convocó asimismo a construir unidades de producción socialista para enfrentar patrones capitalistas centrados en la búsqueda de ganancias que provocan paradojas como el crecimiento de precios pese a las subvenciones.