Mientras expande su industria petrolera y la certificación de
reservas de hidrocarburos, Venezuela avanza en un programa de ahorro
energético que incluye la sustitución gratuita hasta hoy de casi 75
millones de bombillos.
El plan busca remplazar bombillos incandescentes por ahorradores,
que consumen casi 80 por ciento menos de energía, parte de la
denominada Misión Revolución Energética, que abarca también el
estímulo de uso de energías renovables.
En esta dirección el programa Sembrando Luz de la Fundación para
el Desarrollo del Servicio Eléctrico ha instalado 779 sistemas
fotovoltaicos en zonas aisladas, fronterizas e indígenas que
llevaron la electricidad a más de 100 mil venezolanos.
Quinto exportador mundial, con producción de 3,3 millones de
barriles diarios (mbd), Venezuela espera convertirse para 2009 en la
primera reserva mundial de hidrocarburos, cuando concluya un proceso
en marcha de certificación en la Faja del Orinoco.
Con un reservorio de algo más de 134 mil millones hoy, los
expertos estiman que el país suramericano podrá certificar de 316
mil a 320 mil millones acorde la metodología internacional.
Paralelamente Petróleos de Venezuela (PDVSA) anunció que prosigue
la prospección en otras regiones, además del Orinoco, sumado a un
plan de inversiones para alcanzar en 2010 cuatro mbd y 5,8 mbd para
el 2021.
Pese a tener reservas para 200 años más, la política del gobierno
del presidente Hugo Chávez se encamina a un uso racional de los
combustibles fósiles, patrón en el cual se incluye la campaña de
cambio de bombillos.
Durante la primera fase iniciada en noviembre de 2006 del proceso
que realizan jóvenes agrupados en el Frente Francisco de Miranda,
fueron reemplazados 53 millones de bombillos y otros 15 millones en
una segunda etapa.
En la tercera fase, actualmente en proceso, iniciada el pasado
abril, se cambiaron seis millones 617 mil 819 unidades.
En las dos primeras fases el ahorro de energía ascendió a mil 800
megavatios, a los que se sumarán con la tercera 500 megavatios,
expresión de una política que busca no solo ganancias materiales,
sino también previsión hacia el futuro y benificios ecológicos.