La decisión de Polonia y Estados Unidos, anunciada el jueves,
"demuestra absolutamente lo que decíamos en los últimos tiempos",
declaró el mandatario ruso.
"El momento fue elegido (deliberadamente). Por eso los cuentos de
hadas sobre defensa contra supuestos estados fuera de la ley
mediante estos equipos no se tienen de pie", criticó.
En cuanto a la situación en Osetia del Sur, luego del ataque de
Georgia, Medvedev manifestó que es "poco probable" que, tras el
conflicto del Cáucaso, las repúblicas de Osetia del Sur y Abjazia
puedan integrar un mismo territorio con Georgia.
El mandatario dijo que las fuerzas de interposición rusas
permanecerán como garantes de la "seguridad", y advirtió que Moscú
reaccionará "del mismo modo" que en el conflicto en el Cáucaso, si
son atacados sus ciudadanos o sus fuerzas de paz, según reporta la
agencia Interfax.
En tanto, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza
Rice, se reunió hoy con el presidente georgiano, Mijail Saakhasvili,
acusó amenazadoramente a Moscú y dijo que el primer problema a
resolver es el retiro de las tropas rusas acantonadas en Osetia del
Sur.
Desde Moscú, PL informó que Rusia incautó gran cantidad de armas
estadounidenses halladas en almacenes de tropas georgianas, indicó
el vicejefe del Estado Mayor ruso, Anatoli Nogovitsyn.
Las fuerzas rusas evacuaron 1 728 armas en la ciudad georgiana de
Senaki, declaró el general ruso, quien expresó su interés en conocer
qué cargamento llevaban los cinco aviones militares de transporte
norteamericanos C-17 llegados esta jornada al aeropuerto de Tiflis.